Literacidad: Una Propuesta de Innovación Educativa Poscuarentena

El concepto busca ir más allá de la comprensión de los textos y promover la comprensión del mundo

Se ha puesto de moda hablar de la era poscovid-19 después de que las escuelas en México reiniciaron sus clases presenciales el pasado 30 de agosto. Ciertamente ese discurso invita a tomar un profundo respiro, tras 17 meses de cierre de los edificios escolares (Versa, 2021). Pero, si en la semana del 18 al 24 de octubre tuvimos 25,759 nuevos casos y 1,571 muertes (JHU, 2021) resultaría más lógico sustituir la idea del poscovid por la de los efectos del covid-19. Aquí interesa detenerse en el efecto de innovación que ha generado esta pandemia entre las y los educadores.

En el intento de aprovechar dicho efecto, se desea enfatizar la importancia de un mandato constitucional escasamente atendido, pero que tiene el potencial convertirse en un parteaguas que mejore la forma convencional de educar. Tal propuesta se define técnicamente como literacidad transdisciplinar multimodal. Estos tres términos son complejos e inusuales, pero serán explicados brevemente en este texto.

La sugerencia de aprovechar la ventana de oportunidad abierta por la cuarentena impuesta para mitigar los efectos del coronavirus, se deriva de los testimonios docentes expresados tras el shock causado al tener que educar en línea, además de la revaloración que su labor tiene en la vida de las(os) estudiantes. Ambos factores despertaron su interés por adoptar alternativas que posibiliten la introducción de un aprendizaje más significativo y contemporáneo.

La noción de literacidad puede convertirse en la respuesta a esa inquietud por la innovación pedagógica y la digitalización de las prácticas docentes. El concepto de literacidad es un mandato constitucional, introducido en el Artículo 3º. En el undécimo párrafo se establece que, en los planes y programas de estudio: “se incluirá el conocimiento de las ciencias y humanidades: la enseñanza de las matemáticas, la lectoescritura, la literacidad . . .” (DOF, 2019). Congruente con ese mandato, la Universidad de Guadalajara ya está formando expertos en ese campo, a través de su Maestría en Literacidad. También estableció el Instituto Transdisciplinar de Literacidad que está teniendo un creciente impacto internacional. Pero en México, otras respuestas a este mandato no son visibles.

La esencia de la literacidad es que elimina aquellas perspectivas que jerarquizan o subordinan a las y los estudiantes, bajo el prejuicio de que existen talentos privilegiados. Con gran frecuencia, esa concepción está más cercanamente asociada a la extracción socio-económica del educando que a sus talentos. Por el contrario, la literacidad asume que cualquier persona, sin importar su origen y circunstancia, es competente para aprender, porque el deseo de saber es parte constitutiva de la naturaleza humana, según Aristóteles. A manera de motivarles, la literacidad incorpora en el currículum las identidades, las historias, el contexto y la voz de las(os) estudiantes en el salón de clases. Esto último (la voz), implica una gran innovación porque típicamente, en las aulas mexicanas se pide a las y los estudiantes mantenerse callados. La consecuencia es que, en lugar de formar ciudadanos críticos, se educa para desarrollar personas silentes obedientes.

La literacidad tiene sus raíces en las ideas de Paulo Freire, quien desarrolló una pedagogía que permitiera a cualquier persona, sin importar su origen, ir más allá de la comprensión de los textos. El mostró cómo enseñar de manera tal, que “al leer la palabra”, también se “lea al mundo”. La literacidad ha desarrollado procesos de enseñanza-aprendizaje eficaces que permiten a las y los educandos (desde el aprendizaje de las primeras letras hasta el posgrado) no solamente “leer las líneas, sino leer entre líneas y leer tras las líneas” (Gee, 1999). Ello implica reconocer las intenciones de las y los productores de textos, para desarrollar el pensamiento crítico y tomar decisiones informadas, en lugar de aceptar como dogmas, las grandes mentiras de la “infodemia” digital.

La literacidad se transforma en multimodal, cuando la práctica educativa se ocupa de la tarea de enseñar a descifrar la multiplicidad de lenguajes y sus intenciones. Ambos están embebidos en los productos humanos (lenguaje corporal, espacial, objetual, textual, arquitectónico, comercial, artístico, mediático, digital). Y todos ellos se consideran modos de expresión humana. De ahí la palabra multimodalidad, porque las personas utilizamos muchos modos para expresarnos. En la literacidad multimodal, se aspira a formar personas sentipensantes.

La literacidad tiene como principio nodal la continua expresividad que, como ya se dijo, hace a un lado la práctica postcolonial de mantener a las(os) estudiantes en silencio (Gayol, Smagorinsky y Rosas, 2020). Desde la literacidad, no solamente se educa para leer y comprender un texto, sino también para escribir, escuchar activamente, evaluar y expresarse de manera competente en los lenguajes oral, escrito, estético, objetual y digital. Al salir del aula para conocer su entorno, las(os) estudiantes se vuelven críticos y se convierten en autores, difusores y gestores del mejoramiento de sus comunidades. En Australia, Canadá los Estados Unidos y el continente africano existen numerosas investigaciones que han demostrado el éxito rotundo que tiene la innovación educativa con el enfoque de la literacidad multimodal.

En lo relativo a la transdisciplinariedad, se observa que esta noción gana presencia cuando el famoso filósofo francés Edgar Morin y sus colegas, firman en 1994, la Carta de la Transdisciplinariedad (Nicolescu, Morín y de Freitas, 1994). Ahí se expresa preocupación por la segmentación temática del saber, la hiper-especialización y el privilegio conferido al pensamiento lógico-racional frente las humanidades y las artes. Esta aproximación no se propone combatir a las disciplinas, sino busca abrir sus fronteras para convertirse en un complemento que formule perspectivas mejor articuladas sobre la naturaleza y la realidad. La transdisciplinariedad revalora todas las formas de conocer, no sólo la lógico-racional, sino también las emociones, la intuición, y el imaginario social.

A través de esta apretada síntesis de los principios y pedagogías especializadas que se utilizan en la literacidad transdisciplinar multimodal, se propone considerarla como una opción eficaz para enfrentar nuestra compleja época. Al facilitase la formulación de visiones holísticas que contextualizan el saber, se amplía la conciencia, se mejora los resultados de aprendizaje y se dignifica a las(os) estudiantes. Adicionalmente, se apoya a las comunidades humanas que rodean a las escuelas, al asumirse como premisa que la economía y el saber deben estar al servicio de las personas, y no a la inversa.

Referencias
• DOF (2019, 15 de mayo). Reforma al Artículo Tercero Constitucional. En https://www.dof.gob.mx/nota_detalle.php?codigo=5560457&fecha=15/05/2019&print=true

• Freire (1970). Pedagogía del oprimido. México: Siglo XXI Editores.

• Gayol, Y., Smagorinsky, P., & Rosas, P. (Eds.) (2020). Teacher education: national challenges and global lessons. UK: Bloomsbury.

• JHU (2021, October 26). Coronavirus Resource Center: Mexico. Johns Hopkins University. En, jhu.edu

• Gee, P. (1990). Social linguistics and literacies. Ideologies in discourses. London: Routledge.

• Nicolescu, B., Morin, E.,& de Freitas, L. (1994 November 2-7). Carta de la Transdisciplinariedad. Primer Congreso Mundial de Transdisciplinariedad. Arrábida, Portugal, https://www.filosofia.org/cod/c1994tra.htm

• Verza, M. (2021,30 de agosto). México regresa a clases . . . en teoría. AP News. En, https://apnews.com/article/noticias-12dfcbbaad993e68017f77f43adf5f55

Sobre la firma
Yolanda Gayol
Graduate Faculty Fellow en Fielding Graduate University y profesora visitante distinguida de la Universidad de Guadalajara

*Graduate Faculty Fellow en Fielding Graduate University y profesora visitante distinguida de la Universidad de Guadalajara. Este año ha sido nominada para recibir el premio al mejor libro de la Asociación de Investigación en Literacidad (LRA) del Reino Unido. El libro: Developing culturally and historically sensitive teacher education, en el cual es coeditora y coautora, fue publicado por Bloomsbury en septiembre de 2020.

1 comentario en «Literacidad: Una Propuesta de Innovación Educativa Poscuarentena»

Deja un comentario

Descubre más desde CAMPUS

Suscríbete ahora para seguir leyendo y obtener acceso al archivo completo.

Seguir leyendo

campus
newsletter

Recibe en tu correo electrónico la edición semanal de Campus todos los jueves. 

Bienvenido

Contenido exclusivo para suscriptores

CAMPUS

Ingresa a tu cuenta

Regístrate a Campus

Contenido exclusivo suscriptores

Modalidad en línea

  • Examen de Habilidades y Conocimientos Básicos

ESTAMOS PARA SERVIRTE

Mándanos un mensaje para atender cualquier apoyo que necesites sobre el sitio Campus, el suplemento semanal, nuestros productos y servicios.