La propuesta consiste en realizar un bordado con la frase “No es no” para conformar una pieza colectiva
Conscientes de que el arte textil es un lenguaje poderoso y una forma de crear comunidad, se llevó a cabo la presentación del proyecto No es no. Hilos que bordan sororidad, organizado por la Unidad de Género y Diversidad Sexual (UGEDIS) de la Unidad Azcapotzalco de la Universidad Autónoma Metropolitana (UAM).
Durante la Jornada por la sororidad y la cultura de la paz, transmitida en redes sociales, se dieron los pormenores de la propuesta: un llamado para que mujeres de diferentes edades se sumen con un bordado de 25x25cm para conformar una pieza colectiva.
Por ello, se invitó a estudiantes, trabajadoras y profesoras de la comunidad universitaria y otras instituciones a realizar una pieza con la frase “No es no”, como una consigna para visibilizar toda acción violenta a la que las mujeres tienen derecho a negarse.
Al presentar el proyecto, la maestra Verónica Arroyo Pedroza, académica del Departamento de Evaluación del Diseño en el Tiempo y una de las responsables de la iniciativa, explicó que se trata de un acto simbólico para dar voz a ellas y sembrar una pequeña semilla de sensibilización por medio del arte de protesta.
“La violencia de género contra niñas y mujeres aumenta cada día a nivel mundial, son miles y miles que desde diferentes frentes hacen el esfuerzo para contrarrestarla, combatirla y erradicarla. Como diseñadoras y desde nuestra trinchera de trabajo no queremos ser la excepción y queremos sumarnos con este acto”.
Arroyo Pedroza refirió que el bordado se ha vuelto una herramienta de denuncia desde el ámbito de lo femenino, una expresión profunda y ritual que ha servido de inspiración para mujeres de diferentes edades y latitudes.
“Una inspiración que ha llegado a través de personas que antes de nosotras sintieron esta misma necesidad de hermanarse. Con este paralelismo entre mujeres, con todos sus abismos y sus crestas, desde la UAM queremos decir: No es no, eso no es un piropo, eso no es una caricia, eso no es amor, porque la violencia nunca será amor”.
La artista textil Elena Martínez Bolio, quien ha colaborado en comunidades indígenas y cuyos trabajos han estimulado este proyecto, compartió su experiencia y aseguró que un hilo y una aguja pueden ser las herramientas más sencillas para generar cambios poderosos, pues a partir de esta técnica muchas mujeres se han expresado y han hecho permanecer su voz en el tiempo.
“Es una oportunidad que tenemos para, puntada tras puntada, ir a un mundo donde sea más evidente poder decir de manera más afable, más empática y más hilvanada lo que nosotras queremos. El acto de bordar es un lenguaje, es fuerza y la unión en otros mundos distantes para decir que no estamos solos”.
Esta práctica ha renacido y es asombroso ver cómo mujeres de todo el mundo están en parques y colectivos bordando y pronunciándose contra la violencia, el maltrato y la muerte, con lienzos que guardan sus miedos, pero también sus esperanzas.
Por lo anterior, invitaron a la comunidad de mujeres de la Casa abierta al tiempo y otras instituciones a sumarse a este proyecto. La recepción de piezas será hasta el martes 15 de febrero de 2022 en el correo bordandonoesno@gmail.com.
Dicha convocatoria se da como parte de las actividades por el Día Internacional de la Eliminación de la Violencia contra la Mujer y es organizada por la UGEDIS en colaboración con la División de Ciencias y Artes para el Diseño (CyAD) de la Unidad Azcapotzalco.
